Porque tuve hambre y me disté de comer.
Cierto día en medio del fuerte calor del desierto con temperatura a más de 45° este hombre se acercó. Solo quería comida y algo de dinero; yo solo tenía dos sándwiches que eran para mi almuerzo, sin verlo a la cara le di uno. A los pocos minutos levante mi mirada y lo veo sentado no muy lejos de mí, con un bebé en brazos de la edad de mi hijo, lo que me partió el corazón fue ver al bebé en estado de desnutrición y muy débil, compartió con el bebé de la comida que le di; así que busque 5 ghenes (moneda local) en mi mochila, suficientes para una botella con agua fría (por el calor) y se la di, para mi sorpresa también se la dio al bebé.
En eso el Espíritu Santo me habla que me acercara a Él y le diera testimonio, que compartiera mi fe; en mi poco árabe le hable de Él. Le digo que soy seguidor del Mesías, y que Él me había enviado. Acá no es bien visto decir que somos cristianos pues produce rechazo; al final le pregunte si podía orar por El en el nombre de Jesús.
“En verdad os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos hermanos míos, aun a los más pequeños, a mí lo hicisteis.” Mateo. 25.40
Pequeñas victorias, nos gozamos en ellas y la bondad de Dios.
Estamos como familia en un país árabe con mucha historia. Y actualmente tiene una de las más grandes escuelas del Islam y una de las más importantes.
Agradecidos con Dios de servir acá, aun en medio del temor, del rechazo, de la limitante del idioma y la fuerte opresión espiritual. Oramos cada día por una oportunidad para servir.
Concientización
A veces las distracciones humanas nos desvían de lo que Dios quiere hacer.
Es importante estar sensibles a la voz de Dios y lo que su Espíritu Santo nos pide y dice cada día.
Oración
1- Oremos por más contactos guiados por el Espíritu Santo para dar testimonio de Jesús.
2- Por discernimiento para saber a quién acudir y no ser movidos por la lástima.
3- Por hombres y mujeres de paz.